Volvemos a
intentar realizar otro pan con masa madre en freidora de aire, este
es el tercero que realizo, poco a poco, voy optimizando el punto de
cocción, pero aún no me termino de fiar de la masa madre y la
combino con levadura fresca.
Ingredientes
(700 g aproximadamente):
200 g de agua tibia
12 g de levadura fresca
125 g de masa madre
300 g de harina
3 cucharadas soperas de azúcar
morena
1 cucharada de margarina
1 cucharadita de sal
Preparación (70 minutos, incluyendo
la fermentación de la masa):
Últimamente,
tengo olvidada la amasadora y me ha dado por amasar los panes
manchándome mis manitas, casi cuesta menos amasarlo a mano que
después limpiar la amasadora.
También os
comento, que como no me gusta mancharme las manos, opte por amasarla
con guantes de silicona, después, se manchan y no quieres
desecharlos todavía, se limpian estupendamente bajo el grifo de
agua.
Calentamos el
agua, el azúcar y la mantequilla, en el microondas durante un
minuto.
Cuando el agua
este templada, introducimos la levadura, para que comience a
fermentar.
En un bol grande
colocamos la sal en una esquinita.
Añadimos el
harina al bol, realizamos un agujero en el centro de la harina y
colocamos en él la masa madre y el agua con la levadura, el azúcar
y la mantequilla.
Removemos hasta
que podamos trabajar la masa en la encimera.
Amasamos bien
durante unos 10 minutos.
A medio amasado,
precalentamos la freidora a 80º durante 5 minutos añadiendo medio
vasito de agua en el fondo del cestillo para que al hornearse el pan
se hidrate bien.
Cuando tengamos la
masa bien amasada, damos al pan forma de bola, aplastándola un poco
para darle forma de hogaza.
Colocamos nuestro
pan un molde de silicona del tamaño del cestillo de la freidora,
utilizando un molde de silicona o papel de hornear para no manchar el
cestillo.
Colocamos el pan
con la freidora precalentada, pero apagada, durante 30 minutos
o hasta que la masa doble o triplique su tamaño.
Damos unos cortes
a la masa, en mi caso, con unas tijeras de cocina y espolvoreamos con
un poco de harina por encima, para darte el toke de pan rústico.
Horneamos a 180º
durante 15 minutos.
Damos la vuelta al
pan y horneamos 10 minutos más, comprobando el estado de cocción a
los 5 minutos.
Dejar enfriar
sobre una rejilla y a disfrutar de un pan casero recién hecho, ah y
disfrutar del delicioso olor a pan recién horneado en casa, no tiene
precio.