Hoy traigo un plato
delicioso y además cómodo de comer.
Ingredientes (2 personas):
1 cuarto trasero de pollo
1 patata muy gorda
2 tomates
2 zanahorias
1 vaso de vino blanco (moriles)
Curry
Sal
Aceite
Preparación:
Para la realización de esta
receta es necesaria la utilización de una cazuela o sartén con el fondo grueso
y una tapadera que tape muy bien.
El secreto de esta receta, consiste en hacerla a
fuego muy lento, lentísimo, yo lo he comenzado a cocinar en vitroceramica que
va graduada de 0 a 6, al principio al 2 y cuando están todos los ingredientes,
se tapa y se baja al 1.
Para realizar esta receta no
es necesario poner aceite, basta con la propia grasa del pollo (aunque yo le
pongo aceite que queda más rico).
En primer lugar deshuesamos
el pollo (podemos pedir al carnicero que nos lo deshuese).
Colocamos la cazuela al
fuego, añadimos un generoso chorro de aceite y sin esperar a que se caliente
agregamos el pollo cortado en dos trozos.
Pelamos lavamos y cortamos
la patata en dos partes (yo puse dos patatas gigantes para utilizar una de ellas
en otra receta).
Agregamos la patata a la
cazuela.
Pelamos las zanahorias, las
troceamos en trozos grandecitos y las añadimos al resto de los ingredientes.
Sazonamos al gusto todos los
ingredientes con sal y curry (existen más especias que la típica pimienta).
Colocamos dos tomates
enteros también en la cazuela.
Añadimos el vaso vino.
Tapamos la cazuela, bajamos
el fuego al mínimo y dejamos cocinarse alrededor de una hora con la precaución
de cada 15 minutos ir dando la vuelta a los ingredientes para que se hagan
igual por todos lados.
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