Sigo buscando formas de consumir
calabaza sin aborrecerla y aun me quedan tres calabazas en casa…
Realmente, lo que he hecho han sido
más bien unas magdalenas de calabaza, pero la idea la saque de esta receta.
Ingredientes (14 pastelitos):
100 g de leche condensada
20 g de mantequilla
½ vasito de vino conteniendo leche normal
15 g de levadura seca
200 g de calabaza cocida
250 g de harina
Sal
Preparación:
Colocamos el vasito de leche en el
microondas y calentamos hasta que este templada.
Agregamos a la leche caliente la
levadura.
En un recipiente suficientemente
grande para que nos quepan todos los ingredientes, vamos colocando la harina,
la sal, la calabaza, la mantequilla, la leche condensada, la leche que hemos
mezclado con la levadura y mezclamos primero con la ayuda de un tenedor o
cuchara… nos quedara una masa clarita que podemos terminar de mezclar con la
batidora.
Dejamos reposar un par de horas
tapada con plástico de cocina.
Precalentamos el horno a 180º y
mientras vamos colocando la masa en moldes.
Horneamos unos 30 minutos a 180º y
comprobamos.
Le vamos poniendo otras dos tandas
de unos 15 minutos cada una.
Cuando pinchéis un pastelito con
una brocheta y esta os salga limpia, dejáis enfriar, desmoldar y a consumir.
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