La otra noche,
pedimos comida china para cenar en casa y nos sobraron dos panes chinos, con
los cuales unidos a dos trozos de longaniza que teníamos perdidos en el
congelador, nos resultó una fantástica cena.
Advierto que os saldrá
un bocadillo súper grueso, que es difícil de comer, pero en ello también
estriba la gracia, de ver como el otro comensal se las ingenia para comérselo,
mientras tú también investigas la forma de comértelo, vale copiarse.
Ingredientes (2 personas):
2 panes chinos
2 longanizas gruesas (con la longitud de los panes)
2 lonchas de jamón dulce
2 tranchetes de queso
Lechuga
2 tomates
Aceite de oliva
Sal
Preparación:
Estos bocadillos
chinos, los podemos preparar con antelación, puesto que antes de servir les
daremos un golpe de horno, así nos llegaran crujientes y calentitos a la mesa.
En primer lugar
freímos en una sartén las longanizas con un generoso chorro de aceite de oliva.
Una vez fritas las
longanizas, las retiramos de la sartén, dejándolas enfriar para trabajar con
comodidad con ellas.
Mientras preparamos
la salsa con la cual untaremos el pan.
Colocamos en el
vaso de la batidora el aceite sobrante de freír las longanizas, los tomates
troceados y la sal, triturando todo ello.
Como el pan chino
es bastante alto, lo cortaremos en tres rodajas longitudinalmente.
Untamos con la
salsa de tomate preparada todas las caras interiores de nuestros panes chinos.
Colocamos en un
plato la rebanada inferior del pan y sobre ella colocamos una longaniza también
cortada en dos longitudinalmente.
Cubrimos la
longaniza con una hoja de lechuga.
Tapamos la lechuga
con la rodaja central del pan chino.
Sobre la parte
superior de la rodaja central colocamos una loncha de jamón dulce, cubriendo
esta con un tranchete.
Tapamos con la
rodaja superior del pan chino.
Repetimos la operación con el otro pan chino.
Hornear unos 20
minutos a 150º a partir de horno frío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario