En esta ocasión he querido
hacer una tortilla más o menos tradicional, en sartén moderna (de las de
cerámica) combinando los sabores de la patata, el esparrago tierno, la cebolla
y el pimiento.
El resultado lo tenéis en la
foto, como empieza a ser habitual, el centro de la tortilla siempre se me
tuesta más que los lados…
Ingredientes (4-6 personas):
6 huevos
1 manojo de espárragos tiernos
1 cebolla
1 pimiento italiano
2 patatas medianas
1 chorrito de leche
Aceite de oliva
Sal
Preparación:
Pelamos y troceamos la
cebolla.
Retiramos las semillas del
pimiento y lo troceamos también.
Pelamos y troceamos las
patatas a daditos.
Introducimos todos los
ingredientes juntos en la freidora a temperatura baja, para que más que freírse
se cuezan, para que nos queden muy jugosos los ingredientes.
Cocemos los espárragos con
un chorrito de aceite y sal, tapados en el microondas, hasta que nos queden
tiernos, sin pasarnos, para no se nos resequen.
Dejamos escurrir la cesta de
la freidora.
Mientras en un recipiente grande
batimos los huevos con el chorrito de leche (para que quede más esponjosa) e
introducimos la parte tierna de los espárragos troceada y el contenido de la
cesta de la freidora.
Mezclamos bien y dejamos
reposar unos minutos para que se impregnen bien los ingredientes con el huevo y
se mezclen los sabores.
Colocamos la sartén al fuego
(cuentan que las sartenes cerámicas no necesitan aceite, pero una tortilla de
patatas ha de tener aceite para mi gusto) le ponemos un generoso chorro de
aceite y cuando este muy caliente introducimos la mezcla de la tortilla en la
sartén.
Con ayuda de una espátula de
teflón vigilamos que no se nos peguen los bordes (en teoría con estas sartenes
no se pegan, pero por si las moscas), y cuando este casi cuajada le damos la
vuelta con la ayuda de una tapadera.
Yo le di dos vueltas, el
centro me quedo chamuscadito, el sabor, aun no lo sé, está esperando que
empecemos a cenar…
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