El otro día, compramos medio kilo
de boquerones, los cuales freímos, pero nos sobraron la mitad, así que
aproveche para realizar unos hojaldritos de sobras de boquerones.
Ingredientes (4 personas):
1 lámina de hojaldre congelado
¼ kg de boquerones fritos
150 g de pisto de lata
4 tranchetes de queso
Pimientos rojos asados (para decorar)
Aceite de oliva
Preparación:
Comenzamos por descongelar el
hojaldre, sin que se nos descongele demasiado para poder trabajar con él, con
facilidad.
Colocamos sobre la encimera un papel
de hornear, sobre este colocamos el hojaldre, lo estiramos con el rulo de
amasar y cortamos el hojaldre en cuatro rectángulos de igual tamaño.
Cortamos también el papel de
hornear en cuatro trozos y colocamos cada trozo de hojaldre sobre unos de los
trozos de papel.
Levantamos los bordes de cada
rectángulo de hojaldre formando una especie de cajita con la altura aproximada
de un garbanzo o menos.
Cubrimos cada rectángulo con
papel de hornear y llenamos con garbanzos (tengo en casa medio kilo de
garbanzos que utilizo solo para poner peso al hojaldre, después de usarlos se
vuelven a guardar para un próximo uso), para poner peso al hojaldre, para que
no suba.
Horneamos el hojaldre según las
instrucciones del fabricante.
Dejamos enfriar para trabajar con
comodidad, cubrimos cada rectángulo de hojaldre con pisto (si es casero mejor,
pero en mi caso fue de lata, que para salir del paso sirve).
Colocamos sobre el pisto los
lomos de boquerones (sin espinas, tripas, ni cabezas), cubrimos con un tranchete
de queso, decoramos con una tirita de pimiento rojo asado y horneamos unos 10
minutos a 180 grados con calor arriba y abajo, si lo queréis mas dorado o con
el queso más fundido, gratinar 5 minutos más.
Nota: queda mas rico rociando
nuestros hojaldritos con un chorrito de aceite de oliva antes de hornear.
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